Yo… que claudique ante tú reclamo de galán seductor
A ti te reclamo, que hagas acto de presencia.
Y des el DO mayor a esa hombría.
Que concedas honores a esa galantería de la cual presumías
Que disfraces mentiras, con miradas cautivas
Que destierres rencores con suaves caricias
Que me brindes tu boca con besos indulgentes
Que repitas escenas de tu perfecta cortesía
Renueva tu ternura y vuelve a hacerme tuya
Y después pregúntame con cierta gallardía
Si estuviste bien…
¡Oh mejor… calla esa boca vil mentirosa!
Y no se te ocurra, avivar esta llama
Que me abrasa y calcina.
La que tú encendiste con ignominia mentira.
Esta vez seré yo quien revuelva tus malditas entrañas…
Cuando te deje extasiado de tanta ternura
Cuando alucines al ver, como domino mi cuerpo
Para volverte adicto al deseo
Cuando en tu cuerpo no quepan más caricias
Cuando te hayas bebido uno a uno mis besos
Cuando no puedas más y pidas clemencia.
Cuando descubras quien seduce a quien
Cuando quedes destronado de tanta galantería
Cuando te des por enterado, que una mujer
Cuando decide amar a un hombre, está condenada
A amarlo de por vida...
Copyright© Irene llavero 2011
nº registro:1106149462743
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