Hubo un tiempo que me hiciste sentir lodo
Hubo un tiempo que no entendí tanto desprecio
Y conseguiste que me sintiera intrusa.
Y transpirado amor me sentí la más pequeñita
De las rosas de tu jardín.
Hubo un tiempo que probaste la cosecha de mi piel
El aroma de mi verbo
Y la inmensidad de mi amor.
Tuve durante un tiempo
Tu palabra y tu gesto
Y tuve de ti… una mirada y un beso.
Y tuve de ti… un día una cama y sexo.
A cambio te di todos mis versos.
Mi promesa, mi vida, mi cielo…
Pero te fuiste y sentí en mis carnes
Tu desprecio.
Tan solo pretendías de mí culminar tu deseo.
Y me sentí lodo y me sentí la más insignificante
De las rosas de tu jardín
Y paso el tiempo, tú cuidando tus rosas
Y yo muriendo por ti.
Perdí mi aroma, mi esencia, mis pétalos
Y me preñe de espinas para que nadie
Se acercara a mí.
Hoy que ha pasado el tiempo
Y he aprendido a esquivar
A falsos jardineros
Hoy te digo a ti
Hoy creo que eres tú el lodo
Y que has perdido la rosa más fiel de tu jardín
Y no te tengo desprecio
Ni tan siquiera odio
Tan solo siento pena por ti
Por qué perdiste la oportunidad
De ser el único jardinero de esta rosa
Que hoy ya no está en tu jardín.
Copyright© Irene llavero 2011
nº registro:1105019107555
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